Es la continuación de Tatameo: antes y después del deslave. El lector no necesita leer la primera para entender esta obra, pero es recomendable y así comprender mejor el 100% de las cosas.
Ambientada al cumplirse 10 años del deslave en el estado Vargas. En el año 2010; año en el cual se elegiría el 26 de septiembre la nueva Asamblea Nacional; el poder legislativo de la República Bolivariana de Venezuela. En el 2011; año previo a la elección de un nuevo presidente, o de seguir con el mismo de los últimos 13 años. En el 2012; año de la elección presidencial y de gobernadores. En el 2013; año de otra elección presidencial y de alcaldes y concejales, la elección número 19 del siglo XXI.
Y en el 2014; año sin elecciones, con muchas guarimbas, protestas y peos (problema, lío o embrollo) por todos lados. 15 años desde el 15 de diciembre de 1999. 15 años desde el deslave de Vargas. 15 años desde que a Tatameo y a muchos les cambió la vida. 15 años de Constitución Bolivariana; y pensar que 15 años pueden ser toda una vida. Una novela escrita día a día hasta el 16 de diciembre de 2014.
Muchos venezolanos critican a los Presidentes de la República, pero no aportan soluciones, sino críticas destructivas. Algunos que hemos tenido son muy criticables. Dicen por ahí que los pueblos se merecen a los gobernantes que tienen... quizás una parte, pero otra es digna de alguien mejor.
Por otro lado, hay corruptos y mediocres que opinan como si fueran unos genios, y quizás gobernarían igual o peor, aunque creo que algunos gobernantes son insuperables.
Desgraciadamente, en Venezuela, como que hay un culto a la corrupción y a la mediocridad. Una anarquía casi total, en fin, una gran anomia social. Al que tiene dinero lo tratan muy bien, no importa si es corrupto y mediocre y hasta le dicen doctor y ni siquiera es bachidiez.
Hay unos que como que roban, y roban, y roban y nunca paran de robar. ¿Qué enfermedad será esa? Empezó en el siglo XX, o antes, y como que cada año empeora y ya para el siglo XXI ha avanzado a pasos agigantados. Es una pandemia mundial, pero en ciertos países parece una epidemia o cáncer incurable.
"¡Sálvese quien pueda!", "esto se lo llevó quien lo trajo" (¿quién lo trajo?), "ya esto no tiene compón", "éramos felices y no lo sabíamos", "mejor me voy de aquí", "esto no tiene solución", "patria, democracia y vida"... son las frases de un bando.
"Con el Presidente manda el pueblo", "socialismo del siglo XXI", "por fin tenemos a un buen Presidente", "hasta el dos mil siempre", "patria, socialismo o muerte", "mande mi comandante, rodilla en tierra", "viviremos y venceremos"... son las frases del otro bando.
Cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia, los actos y el comportamiento de los distintos personajes son ficticios, pero cuando el autor terminó de escribir esta novela fue llevado ante los tribunales de injusticia. Se salvó porque afirmó que la culpa es de la Tercera República, que deberían estar en la quinta paila del infierno, y huyó por la derecha silbando como la canción: "... la vida te da sorpresas, sorpresas te da la vida, ay Dios..." y se encontró a Pedro Navaja, con saco y corbata, saliendo de tribunales. Gracias Rubén.
Nota: No le devuelva este libro a quien se lo preste... que compre otro antes de que se agoten, porque no se sabe quién es más gafo: el que lo presta o el que lo devuelve. No adquiera libros pirateados, porque entonces es cómplice de un delito. Pórtese bien para que Dios lo ayude.