Fernando Robles, un experimentado y muy apreciado periodista es asesinado a puñaladas en la puerta de su casa. No existe el portal informativo del que era dueño ni en sus redes sociales antecedente de alguna amenaza; tampoco estaba trabajando en alguna investigación polémica y rara vez profundizaba en notas policíacas.
Es el segundo comunicador que pierde la vida de forma violenta en menos de dos semanas en esa ciudad; antes que él, el publirrelacionista y ex periodista Luis Márquez murió al recibir un disparo en el rostro mientras trataban de robar su auto.
Tanto las autoridades encargadas de procuración de justicia, como el gremio de periodistas, coinciden en que no parece existir relación alguna entre los dos casos, sin embargo, Gabriel Palafox pronto descubrirá que las cosas no son lo que parecen... o a veces sí lo son.
Julián Fuentes, reportero especializado en crimen organizado, muestra a Gabriel y a Pedro Rodríguez, ex periodista convertido en policía, una vieja fotografía en la que aparecen ellos tres, además de sus dos amigos asesinados.
Palafox y Rodríguez afirman que se trata de una triste coincidencia, pero cuando Fuentes les dice que la foto fue tomada por un reportero desaparecido siete años atrás, empiezan a pensar que alguien va por ellos
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Una aclaración:
Estimado lector, apreciada lectora:
La historia que estás a punto de leer ocurre en algún lugar de México. Al avanzar por estas páginas notarás que en ningún momento menciono el nombre de algún estado o de alguna ciudad. Esto es completamente deliberado.
La escribí de esta manera para que seas tú quien llene ese hueco y decida en qué lugar se desarrolla la trama porque, tristemente, podría suceder en cualquier sitio. Podría ocurrir en tu ciudad.
Uno de los ejes centrales de esta novela es la desaparición de un reportero, algo que no es tan inusual como tal vez podrías pensar.
De acuerdo a datos de la organización Artículo 19, al menos 24 periodistas permanecen desaparecidos en México desde el año 2003 hasta el año 2019; además, 127 periodistas fueron asesinados en este país por hechos relacionados con su labor, de enero del año 2000 a junio del 2019.
La que te presento en las siguientes páginas es una historia de ficción, los personajes son producto de mi imaginación, pero cualquier parecido con la realidad, no es mera coincidencia.
Al menos no del todo.
